De película.
Luces, cámara y... ¡acción! Qué fácil es ser feliz cuando tú estás al mando. Eres guionista, directora y protagonista de esta súper producción. Decides quiénes son los buenos y los malos, quiénes son felices y quiénes no. Escoges los lugares, los decorados, los vestidos, las situaciones. Tú eres la encargada de decir quién va a ser el príncipe azul del cuento y tú vas a escribir cómo acaba. Las frases bonitas, las sorpresas, los regalos, los ramos de rosas, los besos, los abrazos, las rupturas y sus románticas reconciliaciones... todo está en tu mano. Él va a quererte, va a tratarte como a una princesa y vuestra historia será la más bonita de todas. Controlas los sentimientos de todos los personajes, cómo se van a portar contigo, las repercusiones que tendrán en ti y en tu historia. Escribes un guión, tu guión, el de tu película. Pero llega el momento de gritar "¡CORTEN!" y meter los títulos de crédito... vuelta a la vida real.