Tu filosofía.
Tú me dijiste que Arquímedes dijo "dadme un punto de apoyo y moveré el mundo", y me llamaste punto de apoyo. Me pediste que nunca perdiéramos el contacto. Hoy, el contacto es el tacto de tus dedos en mis manos, el contacto del tacto de tus labios en mi boca. Me comparaste con ese punto de apoyo que basta para mover el mundo, cuando tú eres el punto de apoyo que mueve mi mundo, cuando tú eres mi propio mundo. Tú... que apareces a trazos de tinta negra en la cara de atrás de alguna postal.
Comentarios
Publicar un comentario