Navidad catorce.

En las calles estalla la Navidad en forma de petardos y me asusta. En las casas, la Navidad se prende como abrazos y cariño. En mi cabeza, la Navidad suena como una canción que repite que lo único que quiero es a ti. A ti, y a ti. Otra vez a ti. Y tu ausencia estalla en mi pecho como los petardos en la acera, y se prende en mi corazón como el fuego más terrible. 

Tengo demasiado amor dentro y no estás para recogerlo.

Me acuesto y abrazo el recuerdo de tu sombra en mi almohada. Perdóname, pero soy incapaz de dejar de llamarte amor. Y al soñar, te me escapas, planean buitres sobre el desierto que queda cuando te vas.

Es Navidad, me faltas... Y yo así no quiero nada.

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